Los brackets son las pequeñas piezas de forma cuadrada que se fijan a cada una de las piezas dentales y que, sujetadas a un arco metálico, permiten el desplazamiento de los dientes. Los Brackets se utilizan en multitud de tratamientos de ortodoncia para corregir problemas de apiñamiento dental, caninos elevados, mordida, etc. Permiten mover y desplazar individualmente todas las piezas dentales en cualquier dirección y su utilización está ampliamente desarrollada para todo tipo de tratamientos de ortodoncia desde hace más de medio siglo.
Los Brackets se pueden clasificar en función del material en el que están realizados, su sistema de unión al arco o ligadura, su posición en la boca, etc.
- Brackets metálicos
Los clásicos brackets metálicos son los que más ampliamente se han utilizado hasta ahora. Aunque se trata de los brackets más antiestéticos, porque son más visibles, suelen resultar más económicos y requieren unos cuidados higiénicos más sencillos que los de otros materiales. (La imagen superior se corresponde con este tipo de brackets)
- Brackets Transparentes
Los brackets transparentes se basan en el mismo sistema que los brackets metálicos, pero son mucho más estéticos al ser menos visibles. Existen brackets de cerámica, de zafiro, de policarbonato, etc. Estos materiales se mimetizan con el color natural de los dientes del paciente y ofrecen un resultado mucho más estético.

- Brackets de baja fricción
El desarrollo del tratamiento con brackets ha dado lugar a distintas técnicas en el método de unión con el arco de sujección. Los brackets convencionales requieren de unas ligaduras metálicas o elásticas para unirse al arco, pero también existen brackets autoligables que llevan una pequeña compuerta o pestaña en la parte frontal especialmente diseñada para sujetar el arco sin necesidad de ligaduras. Son los sistemas de sujeción Damon o Tip Edge, que permiten que los dientes se muevan de manera más suave, sin apenas fricción entre los brackets y el arco que los empuja, de ahí que los denominemos de baja fricción.

Estos sistemas permiten el movimiento de los dientes hacia la posición correcta en un tiempo más rápido y de una forma más cómoda para el paciente, ya que, con una menor presión en sus dientes sufre menos molestias. Además, al no tener ligaduras se ahorran visitas al ortodoncista ya que los pacientes con brackets convencionales suelen tener que acudir a su especialista con mayor regularidad para cambiarlos cuando pierden la tensión y elasticidad necesarias.
- Brackets linguales
Es una modalidad de tratamiento en la que los brackets se colocan en la superficie interna de los dientes por lo que son prácticamente invisibles. En este tratamiento ortodóntico se utilizan brackets específicamente diseñados y fabricados a medida para cada paciente y permiten correcciones dentales para solucionar un amplio espectro de problemas. Están revolucionando el mundo odontológico superando las desventajas de otros sistemas linguales convencionales, especialmente en la interferencia con el habla y en la calidad de los resultados.
